La boda de Marta e Iñigo

La boda de Marta e Iñigo

por Cris

HACE 14 AÑOS…

Iñigo y Marta empezaron a salir hace algo más de 14 años. Amigos desde el colegio, él un año mayor y ella siempre mirándole como ese chico tan guapo de un curso más inalcanzable. Una vez terminada la selectividad, en las fiestas de Majadahonda surgió el amor cuando Iñigo, intentó seducir a Marta diciéndole…

“Que ojos VERDES tan bonitos tienes” y aunque Marta los tenga marrones, casi negros diría yo, supo desde ese momento que acabaría con los años casándose con él, ya que para ellos la clave de una relación tan duradera ha sido la risa y el humor (Marta empezó a reírse desde aquel momento con él, e Iñigo acabó con la cara roja como un tomate al ver que sus ojos no eran de ese color)

Tras años y años de noviazgo y convivencia, un día… Iñigo, sorprendió a Marta con la proposición de matrimonio más original del mundo. Marta, llegaba a casa agotada del trabajo mientras Iñigo la espera nervioso y con las manos sudorosas sentando en el sofá. Según entra por la puerta se saludan como cualquier día. Una vez cenan, Iñigo le dice muy ilusionado que le tiene que enseñar una cosa, tras la sorpresa de Marta ya que esa cosa era jugar a un videojuego de la PlayStation.Como Marta ve muy ilusionado a Iñigo, decide jugar (para ambos, es muy familiar este juego ya que cuando empezaron a salir jugaban mucho a él).

Empieza la pantalla del juego llamado Little Big Planet con el muñeco de una chica morena que ¡¡se llama Marta!! Y aparece un cartel que pone: “sube la colina”, el avatar sube la colina y observa que todo es exactamente igual como en las fiestas de Majadahonda. En la cima de la colina hay otro avatar llamado Iñigo con un cartel que pone: “Hola Marta! Tienes que conseguir pasarte la pantalla para encontrar un tesoro, Trufita y yo te esperamos en casa” (Trufa es el perro de ambos)

Tras pasarse la pantalla (que se le hizo eterna a Marta por los nervios y la emoción) llega a una puerta final en la que hay un diamante y otro cartel que pone: “¡¡¡Lo has conseguido!!!, aquí tienes tu pedrusco soñado, ahora ve a casa”. El muñeco de Marta pasa a otra pantalla a través de un puerta y aparece en un sitio que es exactamente igual que la casa de Iñigo y Marta, con toda clase de detalles. De pronto aparece un perrito llamado Trufa y pone en otro cartel… “Sigue a Trufa hasta el cuarto…”

El avatar de Marta sigue al perro hasta la habitación y allí se encuentra el personaje de Iñigo vestido de esmoquin con un anillo de diamante y con un cartel que pone según te acercas a él, «¿TE QUIERES CASAR CONMIGO?” Marta sin poder creérselo se gira hacia Iñigo y le encuentra arrodillado con un anillo precioso.

Con las preciosas fotos de su boda, ya sabéis la respuesta de Marta…

 

 

¿Qué te parecido la pedida de mano de Iñigo?

 


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